Parado en la esquina
el semáforo en rojo
puedo avanzar pero no lo hago
miles de vidas pasan
vienen y van
y sigo ahí parado
con la mirada perdida
con toda la tristeza del mundo
sigo ahí, la luz cambia
la luz vuelve a cambiar
rojo de nuevo
más vidas y más vidas
luego me desplomé
rompí en llanto
y a nadie le importo.
Precioso, potente
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Gracias 🙂
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«y a nadie le importó.» Me gustó.
Saludos.
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Que bueno que te gustó y gracias por pasar, saludos.
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Gran descripción de la soledad, de como nos podemos sentir solos aunque estemos rodeados de gente. Muy visual. Un saludo.
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Así es, a veces podemos estar en el centro del universo y rodeados de todas las personas pero sentirnos solos, saludos.
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¿Qué será que la soledad con su melancolía puede ser tan bella? Na’, va a ser porque las palabras son tuyas.
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Ay! muchas gracias por tus palabras mi querida Henar.
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