No estarás.

No estás aquí, ahora
ni estarás en una o dos horas
tampoco cuando suba al coche
o cuando pase a cenar al restaurante
de comida china con el gato dorado
no estarás cuando llegue a casa
y no encuentre la llave para abrir la puerta
ni cuando entre y el gato se pasee entre mis piernas
no estarás cuando lave los platos del día anterior
cuando termine la limpieza y encienda el DVD
no estarás más te necesite y necesite hablar
no estarás a la hora de dormir ni en las noches frías
no estarás en ningún amanecer, ni cuando todo empiece de nuevo
no estarás porque ya te has ido.